La decana Elizabeth Lira dedicó parte de la inauguración del año académico de la Facultad de Psicología, a reflexionar acerca de la política de investigación de la Facultad que, desde su mirada, logra la excelencia cuando se nutre de la crítica y del diálogo.
En la ceremonia de inauguración del año académico de la Facultad de Psicología de la Universidad Alberto Hurtado junto con autoridades, estudiantes de pregrado, postgrado, académicos e investigadores de los más variados enfoques de la disciplina, repletaron el Aula Magna de la UAH y escucharon el robusto mensaje de la decana Elizabeth Lira.
La académica tocó varios puntos, el primero de ellos fue la necesidad de reflexionar sobre cómo se está haciendo el trabajo en la Facultad, más cuando este 2019 el cuerpo académico se enfrenta a procesos universitarios complejos como son el segundo año del Doctorado en Psicología, el crecimiento del número de estudiantes de pregrado, la gratuidad como un proceso de equidad, la inauguración del Magíster de Investigación de Psicología, nuevos diplomados, y la acreditación de la universidad después de 21 años de existencia, además de enfrentar temas tan dolorosos como el abuso. En ese sentido, Lira por su consecuente compromiso con los derechos humanos, hizo real hincapié en lo fundamental que es apoyar a las víctimas y asegurar un debido proceso de las partes:
“Las universidades han sido escenario de las denuncias de abusos de poder y de abusos sexuales de académicos y estudiantes y han generado un campo de demandas a las autoridades para garantizar los derechos principalmente de las mujeres. Los abusos denunciados casi siempre habían sido silenciados y encubiertos por las mismas prácticas culturales que toleraban amplios rangos de abuso relacional y cotidiano. La conciencia creciente de derechos ha hecho progresivamente imposible acallar las denuncias de las víctimas. Pero también se ha exigido responsablemente asegurar un debido proceso, garantizando los derechos de las víctimas, pero también de los victimarios, buscando si se puede, su rehabilitación, visión que no goza de popularidad, pero que forma parte de la ética universal de derechos humanos”, señaló.
Por otro lado, la académica destacó la complejidad, rigurosidad y evaluación entre pares que debe tener la investigación: “Esos otros y otras que revisan nuestros escritos… dirigen la mirada hacia aquello que pudimos hacer mejor; nos piden cuentas de los modos de investigar y de las decisiones tomadas; nos lleva al reconocimiento de que nuestra contribución es modesta y que quizás es todavía incipiente. Nos ponen en el lugar de aprendiz y nos fuerzan a enseñar desde ese lugar. Producir un conocimiento sistemático que se ofrece a la evaluación de pares y que se abre a su disputa, es un oficio”, dijo.
A cargo del Doctorado de Psicología la invitada internacional fue la destacada psicoanalista, Jessica Benjamín, miembro del Programa Postdoctoral en Psicoterapia y Psicoanálisis de la Universidad de Nueva York y reconocida por sus importantes aportes tanto al feminismo psicoanalítico como al psicoanálisis intersubjetivo, y por producir ideas y categorías metodológicas para pensar las relaciones humanas en un mundo que exige profundizar y revisar las teorías disciplinares que hacen de la terapia un permanente campo de exploración. Su charla Reconocimiento y tercero moral fue de interés para los y las estudiantes, así como también para integrantes de la Asociación Internacional de Psicoterapia Psicoanalítica Relacional.
La Facultad de Psicología de la Universidad Alberto Hurtado es un referente académico que entrega un servicio permanente de atención psicológica especializado para la población con dificultades de acceso a la salud mental, y genera permanentes lazos con el entorno con el objeto de difundir el conocimiento y/o intervenir en las realidades problemáticas de la sociedad donde la psicología tiene un voz relevante que aportar.